de los atardeceres de antes,
de las mañanas de siempre,
de los amores errantes.
Las promesas de ayer,
los besos que nunca dimos,
y los abrazos que esperamos,
y aquellos que perdimos.
El cielo en mis manos,
y mi vida en las tuyas;
¿volverán los sueños olvidados
de tus manos en las mías?
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